Miley Cyrus convirtió su popularidad en una oportunidad para llamar la atención sobre una de las problemáticas mundiales: las personas sin hogar. En los MTV Video Music Awards (VMA) de anoche, la cantante estadounidense dejó que su acompañante, Jesse Helt, un joven de 22 años que vive en un albergue, recibiera el premio que ganó en la categoría video del año.
“Estoy aceptando este premio en nombre de los 1,6 millones de fugitivos y jóvenes sin hogar en los Estados Unidos que en este momento están muriendo de hambre, perdidos y asustados por su vida. Lo sé porque soy una de esas personas”, indicó Jesse.
“He limpiado sus habitaciones de hotel, he sido un extra en sus películas, he sido un extra en su vida. Aunque pueda haber sido invisible para ustedes en las calles, tengo muchos de los mismos sueños que los trajeron aquí esta noche”, agregó el joven mientras Cyrus, desde su lugar, se secaba las lágrimas.
“He sobrevivido en refugios por toda la ciudad. La industria de la música hará más de US$7 mil millones este año y detrás de estas puertas hay 54,000 personas que no tienen un lugar (en Los Ángeles) al que llamarle hogar”, señaló Jesse, quien ha pasado algunos de sus días en las calles de Hollywood y que ahora tiene un Moonman como recuerdo de esa noche.
Al final, Helt pidió visitar la página de Facebook de Miley para colaborar con la campaña que esta lanzó en Prizeo para apoyar al albergue My Friend’s Place.
En ese sitio, Cyrus insta a sus fans a dar US$5 hasta el 21 de septiembre. Con sus donaciones, los admiradores entran en un sorteo donde pueden ganar la posibilidad de conocerla en su concierto del 28 de septiembre en Río de Janeiro (Brasil).
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