Managua/EFE
Un meteorito caído recientemente en Nicaragua mantiene a su población en un misterio más grande que el causado por la onda expansiva que sorprendió a los habitantes de Managua el día del impacto.
Por un lado está la versión del Gobierno de Nicaragua, que sostiene que se trata de un meteorito que probablemente se había desprendido del asteroide “2014RC”, por otra parte están los escépticos con las más diversas teorías.
Los hechos concretos indican que a las 23:04 hora local del sábado 6 de septiembre hubo una explosión en la zona noreste de Managua, cerca del Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino y de la Fuerza Aérea, que provocó una onda expansiva percibida en toda la ciudad.
Edificios y viviendas vibraron de manera desproporcionada en comparación con el temblor de tierra, apenas registrado como sismo menor en 24 estaciones sísmicas del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter).
En la madrugada del domingo el Ejército de Nicaragua informó del descubrimiento de un cráter de unos 12 metros de diámetro y 5,5 metros de profundidad en la zona de donde provenía la onda.
LAS DUDAS NACEN
Todo habría terminado en una anécdota astronómica, de no ser por ciertos detalles:
- El cráter estaba en una zona militar
- Nadie vio los destellos característicos de un asteroide atravesando la atmósfera
- El Gobierno tardó más de 12 horas en ofrecer una versión sobre el hecho, no mostró el meteorito y solo permitió el ingreso al lugar de medios de comunicación afines.
Pronto las dudas sobre la verdadera existencia de un meteorito empezaron a multiplicarse, sobre todo después que la Asociación Científica de Astrónomos y Astrofísicos Nicaragüenses (Astronic) informara que era improbable que el meteorito que impactó en Managua se haya desprendido del asteroide “2014RC”, porque los eventos habían ocurrido con 13 horas de diferencia.
Aparte, el servicio de vigilancia de asteroides y cometas de la Administración Nacional Aeronáutica Espacial (NASA) de Estados Unidos informó de que no detectó el paso o impacto de ningún meteorito en Nicaragua a la hora del suceso.
Una semana después de que la población de Managua se estremeciera por una misteriosa onda expansiva, las conjeturas van desde la posibilidad de que las fuerzas armadas hayan hecho explotar un búnker, hasta alguna estrategia propagandística del Gobierno.
Los científicos del Gobierno finalmente mostraron rocas que son probablemente del meteorito y anunciaron que las enviarán fuera del país para que sean analizadas.
Mientras tanto, el meteorito se ha vuelto tema de discusión nacional.
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