Con un rechazo a su gestión del 76% de la población, según la última encuesta de Ipsos Apoyo, y un proceso para pedir su revocatoria en marcha, la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, reconoció ayer que no solo atraviesa un “momento difícil” sino que ha cometido “errores” que –sostuvo– intenta corregir.