La transparencia, una tendencia atrevida

1. Llevar una transparencia no significa andar “desprotegida” por la calle. Todo dependerá de qué se ponga debajo de ella. Por ejemplo, si tiene una camisa de gasa transparente, puede ponerse abajo un top, un body, un sujetador tipo bandeau o un brasier simpático.

2. La atención no siempre tiene que dirigirse hace la piel que se vislumbra por la transparencia. De hecho, como mencionábamos en el punto anterior, la prenda que está debajo de la blusa transparente puede ser una pieza llamativa y estéticamente más importante. Su utilidad va más allá de cubrir los pechos.

3. Una opción más arriesgada es no ponerse nada debajo. ¿Cómo? Sí, como lo lee. La idea aquí es buscar blusas que no sean totalmente transparentes, de modo que cubran el área de los pechos. En el mercado hay blusas con texturas, diseños y aplicaciones que tapan justo las “zonas estratégicas” de la mujer.

4. En cuanto a colores, están en boga las blusas de tonos cálidos, vivaces y en bloque. Pero, si busca apuestas seguras, pruebe las blusas negras, blancas y cremas.

5. La tendencia es usar blusas transparentes que sean holgadas.