El mundo del arte te lleva a otras dimensiones. Por ello, si ingresas a él, empiezan a brotar en tu imaginario personajes de ficción o humanizados, pero que, en algunos casos, tienen que ver con tu entorno. Ese es el caso de Valentín Falconí (26), quien desde los 5 años comenzó a explorar con las ilustraciones, la escultura y la plastilina.
Sin embargo, cuando terminó el colegio, el arte dejó de ser su hobby y se convirtió en su profesión, lo que lo llevó a España a estudiar Animación durante 2 años y a especializarse en stop motion.
Así, sus muñecos de plastilina pasaron de su taller a videoclips, videojuegos y spots publicitarios. Uno de sus clientes fue Gian Marco, quien lo contrató para que lo personifique cantando y tocando la guitarra en el video de su canción “Cuéntame”.
TIEMPO REAL
“Hacer animación con plastilina parece fácil, pero no lo es. Se necesita invertir bastante en material y tiempo. Sobre todo esto último, porque, para realizar un segundo de visión humana en pantalla, se tienen que tomar entre 12 y 24 fotografías. Así, al día, trabajando unas diez horas, solo se pueden grabar o filmar entre cinco y seis segundos. Sin embargo, todo depende de lo complejo de la animación, del cortometraje o película encargada. Si se trata de recrear, por ejemplo, una batalla épica, grabas menos”, sostiene el artista.
BEHANCE 2015
Tras su periplo por el Viejo Continente, Valentín ha regresado a Lima para exponer en el Behance 2015, que se realizará el 15 de mayo en un local aún por definir.
“El Behance es una plataforma virtual de artistas y diseñadores donde estos interactúan y muestran sus trabajos. Todos los años se hacen exposiciones de este tipo en el país”, precisa Valen, como también llaman al artista.
Agregó que este año expondrá sobre la elaboración de sus personajes con plastilina. “Mi trabajo es experimental porque no muchos aplican la plastilina para hacer stop motion. No obstante, hay películas emblemáticas de este género como Pollitos en fuga, Pesadillas antes de Navidad o El cadáver de la novia, las dos últimas del cineasta Tim Burton”, dijo.
Antes de volver al mundo animado, Valentín dice que quiere dedicarse a hacer cine. “Quiero ser un director en animación que usa los colores de artistas como Vincent Van Gogh”, acotó.
Por: Martín Sánchez (marsantin1@peru21.com)
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