El ejército de Israel mató este miércoles a un palestino de 19 años cerca de la ciudad cisjordana de Ramala, informaron fuentes médicas y de seguridad palestinas.
Se trata de Mohamad Mubarak, empleado de un proyecto de la agencia pública de cooperación estadounidense USAID e hijo del presidente del comité popular del campo de refugiados de Jalazun y miembro del Fatah, el partido al frente de la Autoridad Palestina.
En un comunicado, el ejército israelí confirmó que sus soldados apostados cerca del asentamiento de Ofra dispararon a un “terrorista que había abierto fuego contra una posición militar israelí”.
“Seguiremos protegiendo a los civiles israelíes de actos terroristas como este”*, declaró el portavoz del ejército israelí, el teniente coronel Peter Lerner, citado en el texto, refiriéndose a un posible ataque contra colonos.
El ministro palestino de Vivienda y Obras Públicas, Maher Ghneim, condenó en un comunicado “un asesinato a sangre fría” y pidió una investigación independiente.
Varios testigos palestinos afirmaron a la AFP que el joven no iba armado y que fue maltratado por los soldados israelíes que le obligaron a sacarse la ropa. El ejército israelí difundió la fotografía de una ametralladora, diciendo que la había usado antes de morir.
En 2013, el ejército israelí mató a 27 palestinos en Cisjordania y a 11 en la franja de Gaza, gobernada por el movimiento islamista Hamas
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