La escalada de violencia entre Israel y las organizaciones armadas palestinas en la Franja de Gaza dejó hoy al menos 16 muertos y más de un centenar de heridos, un día después de la ejecución selectiva del líder del brazo militar de Hamas por parte del Ejército israelí, informó DPA.
Un cohete palestino lanzado desde la franja alcanzó un edificio de viviendas en la localidad israelí de Kiriat Malachi, causando tres muertos.
En contraposición, los reiterados ataques aéreos israelíes contra objetivos palestinos en el marco de su nueva ofensiva bautizada como “Pilar de Defensa” dejaron 13 muertos y al menos 145 heridos, según fuentes del Ministerio de Salud de Gaza, territorio controlado desde 2007 por la organización islamista Hamas.
Entre las víctimas palestinas se encontraban al menos cuatro civiles, entre ellos dos niños de tres y once años y una mujer embarazada, indicó el portavoz del Ministerio, Ashraf al Qedra. Hamas reconoció por su parte la muerte de seis de sus militantes, todos miembros de su brazo militar, las llamadas Brigadas de Al Qassam. Por el momento no se revelaron las identidades de los tres muertos restantes, todos hombres jóvenes.
El Ejército israelí comenzó a llamar a filas a sus reservistas, lo que hizo aumentar la especulaciones sobre una posible incursión terrestre en la franja palestina. Según una portavoz militar en Tel Aviv, desde el comienzo de “Pilar de Defensa” han sido atacados desde el aire o desde el mar más de 160 objetivos en la Franja de Gaza.
Por su parte, Hamas asegura haber lanzado más de 120 cohetes contra territorio israelí. Israel habla por su parte de 135. En grandes ciudades como Beersheva, Ashkelon y Ashdod sonaban hoy una y otra vez las sirenas de alarma. Una cuarta parte de los cohetes pudo ser derribado por el sistema de defensa anticohetes. El Ejército desmintió sin embargo afirmaciones de Hamas de que lanzó por primera vez un cohete Fajr 5 de fabricación iraní contra Tel Aviv.
Mientras tanto, decenas de miles de palestinos se concentraron hoy en la capital de la franja para asistir al funeral del jefe militar de Hamas, Ahmed al Yaabari, alcanzado el miércoles por un cohete israelí mientras conducía. Hamas calificó su asesinato de “declaración de guerra” por parte de Israel y anunció venganza.
Durante el funeral de Al Yaabari y su guardaespaldas, también abatido en el acto, el hijo del fallecido líder de Hamas, Muaz, aseguró que los palestinos no abandonarán la resistencia. “Seguiremos levantando los rifles y seguiremos a mi padre y continuaremos con su mensaje”, dijo el joven de 20 años a la prensa.
“La guerra contra la ocupación continuará. Esta guerra será gradual y se dirigirá paso a paso contra los sionistas hasta que consiga sus objetivos”, afirmó por su parte el portavoz de Hamas en Gaza, Fawzi Barhoum, quien también participó en el funeral, al contrario que los mayores líderes políticos de la organización, Ismail Haniya y Mahmud al Zahar, quienes se ausentaron ante los temores a ser víctimas también de un asesinato selectivo.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró en la noche del miércoles que la operación militar contra militantes palestinos podría ser ampliada en caso de necesidad.
Por su parte, el ministro de Defensa, Ehud Barak, habló de cuatro objetivos de “Pilar de Defensa”: reforzar la disuasión israelí, destrozar la infraestructura de cohetes en la Franja de Gaza, debilitar a grupos terroristas y proteger a la población ante posibles lanzamientos futuros de cohetes. También la oposición mostró su apoyo a la operación.
La nueva ronda de violencia comenzó el sábado, después de que un jeep israelí fuera alcanzado por un cohete lanzado desde la franja. En el ataque resultaron heridos cuatro soldados, algunos de gravedad.
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