PARÍS (EFE).– Al igual que en Finlandia, el Gobierno francés indicó que los productos preparados con carne de caballo serán entregados a asociaciones caritativas para que los repartan entre los pobres.
El ministro de Consumo de Francia, Benoît Hamon, informó que los productos congelados –recientemente retirados de los mercados europeos por contener carne de caballo sin declarar– serán entregados a asociaciones caritativas para consumo de la población pobre.