-Me imagino que, de joven, Mirko Lauer -uno de los periodistas “parametrados” al servicio del dictador Velasco, al que sirvió en La Crónica confiscada jamás se imaginó que de viejo iba a ser la mano derecha de un flamante presidente (Mohme) de la Sociedad Interamericana de Prensa, entidad propietaria de diarios a la que Velasco y sus “parametrados” (el infeliz término fue acuñado por Héctor Cornejo Chávez, rabona jurídica del dictador, al defender los “parámetros” del infame estatuto de prensa que elaboró) atacaban ferozmente por defender a los periodistas. A Lauer no le fue bien en su papel de corifeo de Velasco: terminó deportado por este a México, y sufrió el mismo castigo que los “parametrados” aplaudían para los “enemigos de la revolución”. Otro “parametrado” deportado junto a Lauer fue Juan Gargurevich, al que también ahora hay que escuchar pontificar sobre periodismo y es hasta decano de la facultad de esta materia en la PUCP después de que sirvió a Velasco…
-La intención de voto en San Isidro de Toño Meier (18% Apoyo, 20% CPI, 21% Datum, 23% una privada) fue muy superior al 13% que finalmente sacó. ¿Por qué Meier se desploma así repentinamente? ¿Por qué los personeros prometidos por el pastor evangelista Lay a su candidato Meier no se aparecieron el día de los comicios? ¿Y será verdad ese rumor de que los cerca de cuatro mil electores evangelistas del distrito cambiaron inesperadamente y por consigna su voto en la última semana, y abandonaron a Meier (este número es crítico, pues Velarde ganó con solo 12 mil y pico de votos)? ¿Por qué PPK sorpresivamente endosa públicamente a Velarde en San Isidro si ni movió un pelo por su candidato limeño, Heresi? ¿Por qué el rojo Mirko Lauer defiende ahora tanto al PPC? ¿Por qué algunos expertos caviares salen tan oportunamente a minimizar a los golondrinos? Solo pregunto. Nada más.
Aldo Mariátegui,Ensayos impopulares – Como me acota un amigo: “¿Es acaso una percepción falsa que Villarán no gobierna para los pobres? No. En Miraflores se quejan del paradero final del Corredor Azul y Guerra García lo cambia de ubicación. En el Rímac los usuarios exigen lo mismo y los tuiteros caviares les responden ‘¡caminen, ociosos!’, mientras Guerra García y Villarán los ignoran”.
Aldo Mariátegui,Ensayos impopulares Ipsos-Apoyo le da 16% de aprobación a Susana Villarán, muy cerca de su mínimo histórico de 15% (no recuerdo menos). ¡Una candidata a una reelección con esos famélicos números a menos de un mes de los comicios sí que anda en muy serios problemas! Creo que ni ese ‘flautista de Hamelin’ que es Favre la haría ganar. Más bien, Villarán está jugando la baja, pues Enrique Cornejo ya triplicó su intención de voto y está muy cerca de pelearle el tercer lugar. ¡Y pensar que Mirko Lauer le daba serias posibilidades hace muy poco! Es que los analistas de izquierda andan muy descaminados respecto a las razones de este descalabro: mientras León-Moya y Nelson Manrique lo atribuyen a que se prefirió sacrificar la identidad zurda por hacer el mal negocio de aliarse al toledismo, lo que alienó y pasmó a un electorado activista y militante que se asquea por Ecoteva, Wiener, más bien, sostiene que el camino sí era acercarse a ese centrismo, para así reeditar la supuesta “gran coalición” anticastañedista que la salvó por un pelo en la revocatoria. Lo increíble es que ninguna de las dos posturas quiere aceptar que este anunciado desastre se origina simplemente en que la gestión de la izquierda en la municipalidad limeña ha sido muy deficiente y que –salvo gente muy ideologizada, ‘estómagos agradecidos’ por chambitas y pitucos rebeldes– la aplastante mayoría de limeños no quiere darle otra oportunidad: el fallido Corredor Azul ha sido el clavo en un ataúd tan perforado por errores. Y en el proceso de revocatoria muchos votaron en contra porque consideraban absurdo y cansador ir a varias elecciones seguidas, no porque estuviesen contentos con Villarán.
Aldo Mariátegui,Ensayos impopulares Hacía días que esperaba que la rojimia La República haga una movida en favor de su compañero ideológico Diego García Sayán, más allá de las odas de amor que su también camarada Mirko Lauer le canta siempre en sus columnas. Por eso ayer apareció una muy complaciente “entrevista” (más bien una virtual lustrada de zapatos de la coleguita Ana Núñez), donde el buen Diego nos pretende hacer creer que él no movió un dedo y que más bien “sorpresivamente” le invitaron a ser el candidato peruano a la Organización de los Estados Americanos (OEA) (¡bien que se muere y se mueve hace tiempo por el puesto!), lo que aceptó tras una “reflexión conjunta” con ese lamentable canciller que tenemos.
Aldo Mariátegui,Ensayos impopulares amariategui@peru21.com
Ricardo Vásquez Kunze,Desayuno con diamantes rvasquez@peru21.com