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Shipibos se niegan a abandonar sus terrenos en Cantagallo

Solo unas 70 familias de las más de 400 que permanecían en la zona del incendio se han trasladado a Martinete, donde se han instalado 300 carpas.

Panorama desolador. Lo perdieron todo pero aseguran que no dejarán sus tierras en Cantagallo. (Piko Tamashiro)
Panorama desolador. Lo perdieron todo pero aseguran que no dejarán sus tierras en Cantagallo. (Piko Tamashiro)
César Takeuchi

César Takeuchi

Los shipibo-conibos que lo perdieron todo tras el voraz incendio de la madrugada del viernes se encuentran en medio de un panorama desolador. La mayoría de ellos ha decidido permanecer en Cantagallo ante el temor de que les quiten sus terrenos, por lo que muchos deben dormir a la intemperie.

Perú21 retornó ayer a la zona del devastador siniestro y comprobó que aún permanece ahí un aproximado de 230 familias (más de mil personas). Algunos improvisaron carpas con plásticos, telas y palos para protegerse del frío.
Ellos aseguraron que no dejarán sus terrenos, pues piensan que si lo hacen serán desalojados definitivamente por la Municipalidad de Lima. Prefieren soportar el frío y pasar hambre, antes que dejar sus espacios.

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“La única ayuda que solicitamos son frazadas y carpas para poder dormir. Estamos seguros que no vamos a ser reubicados pues no creemos en las promesas del municipio”, indicó Mario Sánchez.

También acudimos a Martinete, que está frente a la zona siniestrada. En ese terreno, la Municipalidad de Lima ha levantado unas 300 carpas. Hasta ahí se trasladaron unas 70 familias damnificadas, la mayoría contó a Perú21 que pagaba alquiler por pequeños cuartos en Cantagallo.

“Venimos aquí (Martinete) pues no tenemos a dónde ir. Nosotros solo alquilábamos cuartos, pues no éramos propietarios de los terrenos”, afirmó la shipiba Dina Ruiz.

Su vecino, Segundo Rojas, señaló que los dueños de los terrenos “cobraban 400 soles por ocupar un espacio pequeño sin baño, sin agua y sin luz”.

¿Qué pasó con campoy?


La mañana de ayer, el blog de la periodista Rosa María Palacios informó que la Municipalidad de Lima había vendido los terrenos de Campoy que –durante la gestión de Susana Villarán– iban a ser destinados para la reubicación de la comunidad shipiba con el fin de llevar adelante el proyecto Río Verde.

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Ante esta versión, la comuna limeña efectuó una conferencia de prensa para informar que dicho terreno –de 7,000 metros cuadrados– no había sido vendido y que todavía le pertenecía al municipio.

El regidor Wilder Ruiz manifestó: “En ningún momento se ha vendido, sigue siendo de propiedad de la Municipalidad de Lima. El terreno fue adquirido de una forma tan fraudulenta”.

Detalló que este fue adquirido por Portal Campoy SAC en el 2011 a S/7 millones y que el 7 de octubre de 2014, dos días después de las elecciones municipales, la comuna lo compró a cerca de S/17 millones.

En tanto, la ex alcaldesa Susana Villarán escribió en su cuenta de Facebook: “Los deplorables efectos de este siniestro pudieron evitarse si en la zona hoy se estuviese construyendo el Parque Central Cantagallo del Proyecto Río Verde”.

¿SABÍA QUÉ?

  • Tras las declaraciones del burgomaestre Luis Castañeda respecto a que se vendió “ilusiones” a los miembros de la comunidad shipiba, la ex alcaldesa Susana Villarán respondió: “no es una ilusión, es un antiguo proyecto de Lima”.

  • Diferentes instituciones están recolectando ayuda para los más de dos mil damnificados. Por ejemplo, se puede llevar frazadas y alimentos a la Plaza de Armas de Surco y a la iglesia Recoleta en la plaza Francia, en el Cercado.

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