Juez de Arequipa ordenó captura del sacerdote acusado de tocamientos indebidos a menor

El Juez de Investigación Preparatoria del Módulo de Justicia de Mariano Melgar (e), Henry Almikar, dictaminó esta tarde la orden de captura contra el sacerdote José Carranza Chavestas, procesado por el presunto delito de tocamientos indebidos contra un menor de edad.

El fallo fue comunicado en la tarde a la sede de Requisitorias de la Policía para que se inicie la búsqueda y se cumpla con la prisión preventiva de nueves meses, dispuesta por la Primera Sala Penal de Apelaciones de Arequipa.

El menor aseguró que el capellán le tocó las nalgas, pero José Carranza dijo a la Fiscalía que solo le dio una palmada porque se portó mal.

[NOTA ORIGINAL]

La Primera Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Arequipa dictó 9 meses de prisión preventiva contra el sacerdote José Carranza Chavestas, acusado de tocamientos indebidos a un menor.

El juez superior Orlando Abril decidió así revocar la decisión de primera instancia, que desestimó el pedido de prisión preventiva solicitado por la Fiscalía, y dispuso que sea llevado a un reclusorio mientras continúan las indagaciones.

Con esa medida, hoy el juez de investigación preparatoria del Módulo de Justicia de Mariano Melgar, Gino Valdivia, quien había rechazado el pedido del Ministerio Público, debe dictar la orden de captura contra Carranza. El Arzobispado, por su parte, deberá remitir su informe a la Santa Sede (Roma) para que decida qué tipo de proceso se llevará a cabo en contra del capellán dentro de la Iglesia.

El último lunes, monseñor Javier del Río Alba sostuvo que había dos caminos: el proceso administrativo, que tomaría tres meses, o el judicial dentro de la Iglesia, que dudaría seis meses. Se estima que la suspensión sería de 5 años de toda actividad eclesiástica y podría disponerse tratamiento psicológico. Eso depende exclusivamente de El Vaticano.

Antecedentes

El caso sucedió a finales de noviembre del 2016 y fue denunciado en diciembre. Los padres del menor acusaron a Carranza de tocar las nalgas a su hijo de 12 años en un aula del colegio Mariano Melgar.

Según la denuncia, el sacerdote cerró la puerta y las cortinas, le pidió que se inclinara para luego apretarle las nalgas y preguntarle si le gustaba.
El capellán, en tanto, dijo a la Fiscalía que trató de castigar al menor porque se portó mal, que solo le pegó con la palma de la mano. De momento, ha sido separado de toda actividad dentro de la Iglesia.

Nota previa

Un menor de 12 años denunció que el capellán José Carranza Chavestas, profesor de religión en el colegio Gran Unidad Escolar Mariano Melgar, en Arequipa, le habría realizado tocamientos indebidos en los glúteos.

Según el relato del adolescente, él fue castigado junto a tres compañeros. Debían limpiar al salón. Entonces Carranza Chavestas mandó a dos de los estudiantes a buscar baldes y escobas, momento que aprovechó para realizar los tocamientos.

Así lo ratificó Monseñor Javier Del Río Alba, quien agregó que apenas se tomó conocimiento del caso se dispuso la suspensión de las actividades del religioso, por tanto, ya no puede ejercer sus actividades.

José Carranza, quien lleva más de 30 años de servicio en la orden, fue solicitado por el Arzobispado de Arequipa en noviembre del año pasado, tras conocerse la denuncia.

Según él, golpeó las nalgas del alumno como castigo para corregirlo por su mal comportamiento. Pero, reiteró, nunca le realizó tocamientos indebidos.

El obispo de Arequipa dijo que no se justifica ni el castigo físico ni los tocamientos por lo que es necesario una investigación.

A la espera del Ministerio Público

Javier Del Río Alba informó que están a la espera del informe de la Fiscalía para enviar la documentación a la Santa Sede (El Vaticano) donde se iniciara un procedimiento penal administrativo o judicial canónico, que puede llevar a su salida definitiva de la Iglesia Católica.

Además, en declaraciones a RPP, dijo que están investigando si el mencionado sacerdote presenta más denuncias en su contra.

El religioso investigado podría recibir una suspensión de 5 años y otras medidas como tratamientos psicológicos.