Edwin Retamoso: “Sí se puede ganar en La Paz”

Carlos Lara
clara@peru21.com

El desafío del inca. A pocos días del duelo ante Bolivia, Edwin Retamoso visitó la calle Hatun Rumiyoc (Roca Mayor), lugar místico y lleno de historia en el corazón del Cusco, para recibir las buenas vibras y el apoyo del inca que celosamente cuida la piedra de los 12 ángulos para el difícil reto que tendrá la selección en La Paz, donde buscará cambiar el rumbo en la dura pelea por llegar al Mundial de Brasil 2014.

Perú nunca ha ganado en La Paz por Eliminatorias, ¿se podrá romper esta mala racha?
De hecho va ser difícil, complicado, para eso serán estos días de trabajo, para acostumbrarse a la altura y tratar de llegar en igualdad de condiciones en lo físico ante los bolivianos.

¿Cómo imaginas ese duelo?
Bolivia como local, y por tener como aliado la altura, de seguro saldrá a presionar desde el arranque para tratar de asegurar el partido en el primer tiempo. Hay que ser inteligentes y saber dosificar las energías.

Ya pisaste la cancha del Hernando Siles, ¿qué impresión te deja el ‘Nido del cóndor’?
Tuve la oportunidad de jugar con la selección de noche y con Cienciano por la tarde. Es una cancha muy pesada y a la hora del partido hace un sol fuerte, que puede chocar al que no está bien preparado. Mira lo que le pasó a Argentina que, con Messi, recibió seis goles en la pasada Eliminatoria.

¿Qué tanto juega la altura en este tipo de partido?
La altura se siente, no es broma. A los futbolistas que juegan en el llano les cuesta y para eso es este trabajo de adaptación. No hay que temerle a la altura. Nadie ha muerto en una cancha jugando al fútbol. Mucho tiene que ver la parte mental.

¿Alcanzarán los 10 días de trabajo para llegar bien al partido con Bolivia en La Paz?
Eso es lo que se ha planificado y esperamos que todo lo que se ha programado rinda sus frutos y podamos llegar en óptimas condiciones al partido. En la convocatoria que se ha hecho hay jugadores que están acostumbrados y su aporte será importante.

¿Cuál es lugar más alto dónde has jugado?
En Casapalca, que está casi a 4,000 metros de altura. Fue cuando jugaba por el Atlético Minero en la Copa Perú. Era bravo, ahí sí se sentía, pero caballero había que jugar los 90 minutos y aguantar.

¿Qué sientes de haber jugado Copa Perú hoy estás en la selección y protagonista en una Eliminatoria?
Orgullo, satisfacción. A veces me pongo a pensar esos inicios en la Copa Perú y converso sobre eso con excompañeros con quienes jugué en esa etapa. Soy consciente que esta es la oportunidad de mi vida y no la voy a desaprovechar.

¿Es cierto que en Cusco hay buenas vibras y que eso puede ser un plus para la selección?
Sí, se siente un ambiente agradable, la gente es muy amable y cariñosa. Espero que todas esas buenas vibras sean favorables para la selección.

¿En tu caso, cómo haces para no aburrirte en estos 11 días en que estarán acuartelados en el Cusco?
No soy de leer diarios, ni cuando estoy en mis ratos libres. Y cuando estoy concentrado, salvo por alguna emergencia o algún llamado de mi familia, el teléfono lo tengo casi apagado. Y para distraerme navego por internet y me gusta ver películas de acción.

¿Hace poco más de un año te imaginabas este presente, ser un puntal en la selección y en especial para los duelos de altura?
No te voy a mentir que el sueño de todo futbolista es jugar por su selección. Lo veía como una ilusión y se hizo realidad, gracias a mi tenacidad. Hoy estoy viviendo un hermoso sueño que me motiva a dar todo por esta camiseta que representa al Perú.

¿Y en ese sueño que vives, te imaginas con la selección en el Mundial de Brasil 2014?
Claro. Lo máximo para un futbolista es llegar a jugar un Mundial.

¿Esta fecha doble puede marcar el rumbo de Perú en su camino por llegar al Mundial?
Todos los partidos son decisivos y el más próximo siempre es importante. Ojalá que esta fecha obtengamos buenos resultados para seguir en la pelea.

¿Crees que la gente es injusta por el ‘cargamontón’ que le han hecho a Claudio Pizarro por fallarse el penal ante Argentina?
Sí, son muy injustas las críticas. La gente de afuera piensa de otra manera y quiere que todos los partidos marque goles. Su sola presencia le da jerarquía a la selección y genera preocupación en el rival.

¿Cómo te motivas, qué música escuchas en el camarín antes de salir a la cancha?
Me gusta mucho la música latinoamericana, pero escucho a un grupo de mi tierra (Abancay) que se llama ‘Agua Viva’.

¿Le has hecho alguna promesa a algún santo?
Soy devoto del Señor de Huanca y lo visito cada cierto tiempo. Y no le he pedido nada. Cada vez que visito su santuario le agradezco por sus bendiciones y le pido que cuide a mi familia y a mí.

¿Algún plato típico de tu tierra que puedas recomendar en vez de la ‘sopa de cóndor’?
Un delicioso cuy relleno.

¿Te animarías invitarle al profesor Markarián?
Quizá. Vamos a ver. Ja, ja, ja.

¿Te sientes famoso en Cusco o en Abancay, tu tierra?
Nada. Soy perfil bajo. Paso desapercibido. Soy un cholo más en Cusco y Abancay. A veces la gente me pide una foto o un autógrafo, pero son raras veces.

¿Ya se te pasó el miedo a volar en avión?
Siempre hay ese temor. Cuando el avión despega, le pido a Dios que no haya problemas en el viaje.

¿Cómo te imaginas al escuchar pitazo final en el Siles Suazo?
Primero trato de pensar no cómo me irá en ese momento, sino en cómo le vaya a la selección y espero que sea con los tres puntos. No sé si me toque jugar, pero si el profesor Markarián me da la oportunidad trataré de dar todo por el bien de la selección.