Vencer o morir... ¿y el país?

Enrique Castillo,Opina.21
Al revelarse que no habría ninguna renuncia en el Consejo de Ministros, y que en lo fundamental no habrán concesiones, se revelan dos posibles escenarios para la nueva votación por el voto de confianza al gabinete Jara este martes en el Congreso.

El gobierno habría conseguido algunos votos –ya solo le faltaban tres, de acuerdo a lo sucedido en la segunda votación– provenientes de algunos parlamentarios dispuestos a conversar o susceptibles de ser convencidos con pequeños gestos.

Adicionalmente, estaría confiado en poder convencer a la bancada del PPC que enfrenta una disyuntiva, seguir a su conciencia u obedecer la posición del partido encabezada por Raúl Castro que está por dar el voto de confianza. Una muy cercana colaboradora de Ana Jara y militante del PPC estaría pidiendo las citas al más alto nivel en el pepecismo para asegurar el voto a favor. Esto le permitiría enfrentar a las bancadas más radicales –apristas y fujimoristas– sin conceder casi nada.

El otro escenario es el de la franca confrontación. Atrincherarse sin conceder nada y obligar a la oposición a votar en contra, “tumbándose” al gabinete, y asumiendo la responsabilidad de lo que sucedería a continuación. ¿Llegará la oposición hasta las últimas consecuencias? En este escenario, ambos se juegan el todo por el todo.

En cualquiera de los dos casos, el país pierde mucho. Y no solo porque la inestabilidad será mucho mayor, sino porque no habrá posibilidad de recuperar la confianza de los inversionistas en el corto plazo. Porque si el gobierno no concede nada, será difícil normalizar la situación con ministros que penden de un hilo porque podrían ser censurados en cualquier momento por un Congreso impredecible, y porque temas como el de las AFP serán revisados por ese mismo Congreso. Y si la oposición se atrinchera y “tumba” al gabinete, enfrentaremos una situación dramática que será difícil remediar.