● No confunda lo retro con lo vintage. El primero está inspirado en piezas antiguas de fabricación reciente, mientras que el segundo utiliza objetos creados en décadas pasadas.
● En las décadas de 1950 y 1960 se usaban tonos suaves como verdes, amarillos y azules, al igual que contrastes entre negro y rojo, negro y amarillo mostaza, negro y blanco. En los 70, el fucsia, naranja y verde limón fueron los tonos más usados.
● Utilice tapices con estampados florales, de aves y geométricos.
● En cuanto a los materiales, son usuales mobiliario de metal, acrílico, polipropileno, cuero y vinilo (cuerina o marroquín).
● Coloque estas piezas en un ambiente contemporáneo, encuentre el balance entre lo moderno y lo antiguo para que su espacio no luzca recargado.
● Entre los elementos que puede utilizar están: un tocadiscos, un reloj antiguo, imágenes pop art, artefactos como las refrigeradoras Smeg de colores fuertes, etc.
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