El ministro boliviano de Gobierno, Carlos Romero, confirmó hoy que Ángel Roca Rivera, el piloto que fue abatido el último fin de semana en Perú, era un ‘narcoarrepentido’, que había sido condenado por narcotráfico.
“Él estaba en calidad de detenido en 1993 por narcotráfico. Luego fue beneficiado con el decreto de los ‘narcoarrepentidos’. (Ahora) trabajaba con el narcotraficante (boliviano) Lima Lobo y otras personas. Pero no tiene antecedentes de haber pertenecido a un cártel”, dijo a los periodistas.
El 31 de julio de 1991, el Gobierno boliviano promulgó el llamado ‘decreto de los narcoarrepentidos’, que permitía que líderes del narcotráfico quedaran libres después de cinco años de cárcel.
El piloto, de 52 años, fue abatido por policías antidrogas cuando intentaba sacar en una avioneta casi 300 kilos de cocaína de una pista clandestina en Pasco.
El ministro Romero, por otra parte, negó la presencia de cárteles mexicanos en su país.
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