Bolivia: Tarea pendiente

Bolivia tiene una población de 12 millones de personas, un tercio vive en zonas rurales. La edad promedio de sus habitantes es 24 años, mientras que la expectativa de vida es de 68. A fines de 2014, un 39% de la población a nivel nacional cuenta con acceso a Internet, mientras que solo el 8% con un teléfono fijo. En cambio, el 98% señala que posee un teléfono celular.

El Producto Bruto Interno (PBI) per cápita a paridad de poder de compra es de US$6,530, mientras que aún el 12% de la población se encuentra por debajo de la línea de pobreza, de US$2 al día, y cuenta con un coeficiente de Gini de 0.444 (ligeramente superior a la perfecta igualdad).

Bolivia es el país con mayor porcentaje de población indígena de América Latina. Se estima en 62% del total, según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Asimismo, se aprecia que el 50.3% del total son quechuas y el 39.8% son aymaras. La Constitución Política del 2009 reconoce el español y cerca de 36 lenguas indígenas como oficiales.

Así, a pesar de que en los últimos cinco años Bolivia ha logrado tasas de crecimiento del PBI superiores al 5%, no ha sido capaz de incluir a segmentos de la población que se encuentran aún en situación vulnerable. Y es que los niveles de inversión privada son muy bajos; solo representan el 9.6% del PBI. Por ello, no es de extrañar que Bolivia ocupe el puesto 162 de 189 en el ránking de mejor clima de negocios.

El Fondo Monetario Internacional proyecta que Bolivia crecerá 5% en el 2015, mientras que la inflación y el de-sempleo serán de 5.23% y 6.2%, respectivamente. No obstante, preocupa el incremento de la deuda pública, que a la fecha asciende al 20% del PBI y que puede seguir creciendo en la medida que los principales productos de exportación continúen con una tendencia a la baja. Bolivia exporta principalmente gas natural y soya.

El modelo de crecimiento boliviano es un Estado que hace muchas más cosas que las que el sector privado podría hacer. Así, parece que este pronto empezará a mostrar señales de debilidad.