25.ABR Jueves, 2024
Lima
Última actualización 08:39 pm
Clasificados
Opinión

“Quisieron matar, una vez más, al mensajero, como en infinidad de ocasiones…”.

La verdad fue su letra y sus agendas. Hoy, nadie duda de que Nadine Heredia está en serios aprietos judiciales como consecuencia de ese destape que, al inicio, intentaron desprestigiar tanto el gobierno como ciertos coleguitas.

La razón fue que el equipo de Rosana Cueva (a quien no me une amistad alguna, sino respeto por su trabajo y el de su equipo) tuvo la valentía de investigar esa denuncia que quisieron desvirtuar de mil maneras, sometiéndola a comisiones investigadoras en el Congreso con un afán claro de hostigamiento al medio y a los periodistas.

Quisieron matar, una vez más, al mensajero, como en infinidad de ocasiones en nuestra historia reciente. La denuncia de Panorama quiere ser desnaturalizada con una acusación que puede alcanzar sentencias hasta de 10 años de privación de la libertad: revelación de documentos secretos.

Esta figura delictiva, que pretenden encajarle a nuestros colegas, está en el artículo 330 del Código Penal sobre atentados contra la seguridad nacional y TRAICIÓN A LA PATRIA, nada menos.

¿Qué han hecho los periodistas para que el Ministerio de Defensa los acuse de semejantes delitos? Un reportaje propalado el 17 de abril, hace más de dos meses, sobre eventuales malos manejos de dinero del Estado en la zona del Vraem. ¿Demostrar con facturas y testimonios voluntarios de quienes son (algunos al menos) colaboradores del servicio de inteligencia presuntas sobrevaluaciones de gastos en restaurantes atenta contra la seguridad nacional? ¿Acaso no fueron recogidas en el Pentagonito las declaraciones del general EP César Astudillo, quien respondió las inquietudes de Karina Novoa, la reportera que realizó la pesquisa? Coincido con Aldo Mariátegui y Augusto Álvarez Rodrich en que es evidente que una denuncia de esta naturaleza a 28 días de que termine este gobierno lo único que va a lograr es convencernos de que se trata de una vendetta con nombre y apellido.


Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.