El coronel de la Policía en retiro Benedicto Jiménez, quien se encuentra preso en el penal de Piedras Gordas de Ancón mientras es procesado por los delitos de asociación ilícita y lavado de activos, aseguró que no tiene dinero para pagar un abogado y que él mismo asumirá su defensa legal.
A través de una carta enviada a los medios mediante un familiar suyo, Jiménez sostuvo que los abogados que han contactado a su esposa piden “cifras astronómicas” de US$ 40 mil o US$ 70 mil para asumir su defensa. “Tal vez piensan que tengo una mina de oro y no saben que apenas me alcanza para las copias de los escritos y de la carpeta fiscal”, señaló.
El artífice de la captura del cabecilla senderista, Abimael Guzmán, dirige su misiva a Mario Amoretti, decano del Colegio de Abogados de Lima (CAL), institución a la que pertenece en su calidad de letrado y en la que –según menciona– se le ha abierto un proceso administrativo para inhabilitarlo.
En su carta, Benedicto Jiménez también aseguró que ha sido “estigmatizado como uno de los más grandes delincuentes del Siglo XXI” e indicó que ha pedido que se lo traslade a otro penal debido a que aún es procesado, es reo primario y es adulto mayor.
Además, el coronel de la Policía en retiro defendió la labor que hizo en la dirección de la revista Juez Justo, desde la cual, de acuerdo con la Fiscalía, se atacaba y desprestigiaba a magistrados, fiscales, políticos y periodistas que investigaban esta red criminal.
“Mi nombre y el de la empresa Juez Justo no figuran para nada en los supuestos negocios inmobiliarios irregulares del abogado Rodolfo Orellana”, escribió Benedicto Jiménez en su carta.
Cabe recordar que el también abogado Rodolfo Orellana, líder de la red criminal que integraba Benedicto Jiménez y coprocesado en este caso, también dijo que asumiría su propia defensa por falta de recursos.
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