El regidor por Cambio Radical Fernán Altuve, quien se habría salvado de ser revocado según los resultados preliminares de la ONPE, se mostró sorprendido por la “incongruencia” entre el respaldo popular dado a Susana Villarán y la suerte que han corrido los regidores de Fuerza Social.

“Ha sobrevivido la generala, pero ha muerto todo su ejército. Sus correligionarios han sufrido una revocatoria injusta”, dijo en Abre los ojos, tras agregar que si se mantiene la tendencia de los resultados, los que resultarían castigados en este proceso son “aquellos que minimizaron los efectos negativos de la mala gestión administrativa” de Villarán.

De esta forma, criticó el “bullying político” sufrido en la revocatoria tanto por Marisa Glave y Marco Zevallos (Fuerza Social) como por Luis Castañeda Pardo, hijo del exalcalde de Lima y líder de Solidaridad Nacional Luis Castañeda Lossio.

“Si bien es un derecho ciudadano, los niveles a los que llegó este proceso hicieron que no quisiera participar. Yo dije que estaba en contra de la revocatoria, que favorece el bullying político. ¿Es lógico que el 7% del electorado pueda convocar al 100% del electorado a elecciones?”, se preguntó.

Altuve consideró también que la gran fuerza ganadora de esta revocatoria es el Partido Popular Cristiano (PPC).

“Ahora el peso de que Villarán sea una buena alcaldesa está en un partido (PPC), que tendrá que esforzarse por sostener el Consejo Metropolitano, y eso también es un riesgo”, sostuvo.

Finalmente, dijo que el gran derrotado político fue Solidaridad Nacional, al romper su alianza con el PPC.

“Nunca debieron involucrar a los regidores del PPC en esto. Los obligó a defender una gestión que habían criticado”, sostuvo.