A pesar de lo enrarecido del ambiente político actual, lo que estamos presenciando parece ser más un enfrentamiento artificial que una diferencia insalvable. Así, y contra lo que parece primar en un sector importante de opinantes, la potencial censura al ministro de Educación, Jaime Saavedra, está más cerca de un malentendido que una guerra sin cuartel.
Si bien Pedro Pablo Kuczynski ganó la presidencia optando –en el último tramo de la campaña– por un tono claramente antifujimorista, desde que se inició este gobierno la relación oficialismo-oposición ha sido coherente. De hecho, así se dejaba ver en la contienda electoral de primera vuelta, donde se decidió la composición parlamentaria: una cercanía ideológica general entre PPK y FP, con solo algunos matices puntuales.
Cercanías
Entre marzo y junio de 2016, y por encargo de la Universidad ESAN, 50+1 encuestó a 65 de los 130 congresistas electos, a fin de identificar sus posiciones ideológicas en diversos aspectos: política, economía y libertades sociales. Los resultados principales del estudio, inédito en el país, fueron presentados a finales de julio.
Hoy que las distancias parecen insalvables, vale la pena recordar que, en la escala del 1 al 10 (donde 1 es izquierda y 10 derecha), los congresistas de Peruanos por el Kambio (PpK) y Fuerza Popular (FP) se ubican en posiciones bastante cercanas, oscilando entre 5 y 6 puntos. En cambio, el congresista promedio del Frente Amplio se ubicaba más distante. Si bien estas posiciones pueden haber variado una vez instalados en sus curules, los cambios no deberían ser abruptos.
En cuanto a la percepción que se tenía del presidente electo, la distancia que separa al presidente Kuczynski (ubicado siempre a la derecha por los entrevistados de las tres bancadas) del congresista promedio de Fuerza Popular es mucho menor que la que lo separa del congresista promedio de Frente Amplio. Así vistas las cosas, y a pesar de la retórica antifujimorista que decidió la contienda, una dinámica de cooperación programática era más esperable que una de confrontación.
Votaciones en el pleno
La colaboración ppkausa-fujimorista empezó a notarse claramente una vez instalado el Congreso. El oficialismo ha votado en conjunto con la mayoría fujimorista en 82 de las 92 votaciones, aunque han disentido en algunas emblemáticas (elección del defensor del Pueblo y de miembros del BCR, por ejemplo). Si bien el número es menor que en los casos de Alianza para el Progreso (85), Acción Popular (84) y Apra (83), es un número elevado, muy lejos de la agrupación más claramente opuesta al fujimorismo, el Frente Amplio (72).
En votaciones claves (por ejemplo, el otorgamiento de facultades o la aprobación del presupuesto nacional), el fujimorismo ha votado en la dirección en que el Ejecutivo lo requería. Así las cosas, el tono tan polarizado que ha tomado el debate político parece corresponder más a movimientos poco prolijos que a una realidad tangible.
Apoyo al Ejecutivo
Si profundizamos el análisis en los proyectos de ley aprobados en el Pleno, se puede ver que la cooperación Ejecutivo-fujimorismo no ha sido desdeñable. La gran mayoría (23, es decir, 39.7%) de los 58 proyectos de ley aprobados provienen del Ejecutivo.
Es decir, desde el 28 de julio, el principal productor de legislación ha sido el Ejecutivo, para lo cual ha contado con el apoyo del fujimorismo. El celo obstruccionista que se teme parece parte de una leyenda.
Aunque el ánimo actual podría decir lo contrario, la colaboración eficaz que se requiere para gobernar el país no parece muy lejana.
Cifras
- 82 de las 92 votaciones, el oficialismo ha votado en conjunto con la mayoría fujimorista 82 veces.
- 23 de los 58 proyectos de ley aprobados, 23 provienen del Ejecutivo.
*Este contenido fue elaborado exclusivamente para Perú21 por el grupo de análisis político 50+1<
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