23.NOV Sábado, 2024
Lima
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Opinión

Cristal y Aurich ya se enfrentaron en sus respectivas sedes y todavía no se define al campeón del 2014. Como habíamos previsto, era muy posible que se fueran al tercer partido y esto se definirá este domingo en Trujillo. En Chiclayo, lo más resaltante fue la recuperación del Aurich en el segundo tiempo. Después de haber sido dominados largamente en la primera etapa, los norteños salieron al complemento con una actitud totalmente distinta y metieron en su arco a Cristal, esto también por el excesivo retroceso de las líneas celestes. Al final, Diego Penny fue figura.

El miércoles, en la revancha, Aurich sorprendió a Cristal con un planteamiento agresivo. Apretaron y dejaron sin espacios a los jugadores más importantes de Cristal y estos se vieron improductivos. Me dio la impresión de que Daniel Ahmed nunca esperó esto de la gente chiclayana. Pero ese ritmo que impuso Roberto Mosquera a sus jugadores dio frutos para no dejar jugar a Cristal, mas no en lo que se refiere al resultado, por lo que sucedió lo que esperábamos por un tema físico: Aurich, y esto es normal, no pudo sostener esa agresividad en la marca y el partido se hizo de ida y vuelta, sin pausas y con poco juego en el medio campo. Ello hizo que se perdiera el equilibrio en ambos equipos, pues ese sector es el que justamente otorga eso en el fútbol. En esas circunstancias es que mejoró Cristal. Con un juego que más le favorece, apareció en su real dimensión Carlos Lobatón, producto de los espacios que se crearon. En el Nacional, le tocó a Erick Delgado convertirse en una de las figuras del partido. Lo de Erick fue notable y me hizo recordar a ese arquero que en un momento fue considerado el mejor de nuestro fútbol. Ojo, el partido pudo ser para cualquiera, las oportunidades de gol simplemente no fueron aprovechadas. Ahora, en Trujillo, veremos dos cosas fundamentales. Primero, el aspecto físico. Habrá que ver cuál de los dos manejará mejor este punto. En el fútbol no hay que desligar nunca lo físico de lo táctico, así que ambos cuadros deberán ser muy inteligentes para poder llegar con resto y fuerzas al final.

Y muy cerca de esto, la consistencia como equipo. En los dos partidos ambos han adolecido de esto y los dominios fueron alternados en los 90 minutos. Si alguno de los dos consigue tener un dominio claro y ser consistente, de una u otra manera, en todo el partido, ese tendrá la mayor posibilidad de llevarse el título nacional.


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