La inconducta de Cueva y el ‘manual de estilo’ de Cristal

Se jugó, al fin, la final del Clausura y mucha gente me preguntaba no tanto por qué ganó Cristal, sino por qué perdió Alianza, cosa que me sorprendió mucho. Simplemente, les respondía que perdió porque no jugó bien. Ahora, desmenucemos en el análisis lo que pasó en Arequipa.

Sanguinetti deja en el banco a Cueva por un problema de inconducta. Primero, ningún jugador puede decirle a su técnico cómo debe plantearse un partido. Allí primó el principio de autoridad del entrenador, pero creo que allí también comenzó su error: no debió llevarlo ni al banco, pues el simple hecho de tenerlo allí lo condicionó para hacerlo ingresar. Al no arrancar Cueva, el uruguayo volvió al sistema que le dio más resultado y puso tres volantes de marca con mucho trajín de ida y vuelta. Sin embargo, a Albarracín, Míguez y Atoche les costó y los que sufrieron más fueron Guevgeozián y Aguirre. El que estuvo bien fue Landauri, que siempre dio la sensación de desequilibrio.

Alianza volvió a apelar a los pelotazos mayormente frontales, cosa que en este partido no le dio resultado y, así, se facilitó el trabajo de los defensores rimenses. Al final, apelaron a su amor propio y metieron a Cristal en su área, algo a lo que contribuyó mucho el cuadro celeste retrocediendo en demasía. Cristal, con mejor forma física –no olvidemos que Alianza llegó con más carga de partidos–, intentó siempre hacer el fútbol que le dio los mejores resultados, vale decir elaborar y juntarse en determinado sector del campo para después cambiar de frente. Esto se le dio solo en determinados momentos, pero al final le alcanzó con la excelente definición de Blanco. Luego, como ya dije, retrocedió mucho para defender su gol, aunque hay que entender que era un partido definitorio y se jugaba mucho.

Punto aparte para una reflexión: Cristal mejoró cuando los directivos dejaron de hablar del ‘manual de estilo’ y Ahmed pudo encontrar una base que cambió solo por lesiones o suspensiones. Así, desarrolló un buen fútbol en varios pasajes del Clausura y en otros momentos, como ante Alianza, apeló al pragmatismo resultadista. Este fue un cambio inteligente de Ahmed en su manera de enfocar los partidos. Por eso, Cristal ya está en la definición por el título 2014.
Los partidos del ‘play off’ son de pronóstico reservado. Aurich está más entero, pero, al no haber diferencia de goles en los resultados, lo más probable es que nos vayamos a tres partidos para definir al campeón nacional.